Podemos y los Círculos alternativos

Podemos se constituyó como partido político por imperativo legal. No es que quisiera ser un partido más, con todas las connotaciones de vieja política que ello conlleva, sino que para participar en democracia estaba obligado a presentarse como tal. Y como tantos movimientos sociales, no tiene una organización de un partido al uso. A falta de que en la futura "Asamblea Ciudadana Sí Se Puede" que tendrá lugar en otoño se decida la forma de organización que adoptará finalmente, se ha animado a los simpatizantes del proyecto a crear Círculos Podemos.

Los Círculos Podemos son espacios de participación y organización ciudadanos. Suelen ser o bien temáticos (Círculo Música, Círculo Educación, Círculo Autónomos...) o bien formados alrededor de un municipio o región (Círculo Burgos, Círculo Valencia, Círculo Córdoba...). También hay Círculos temáticos centrados en una región concreta. Cualquiera puede crear un Círculo de lo que le apetezca para debatir con ciudadanos afines sobre lo que quieran. Nadie controla su creación, porque no se puede decir que Podemos lo dirija nadie en concreto. Habrá portavoces, candidatos al parlamento europeo y figuras reconocidas dentro del movimiento, pero no dirección. Por ahora.

Suele ocurrir que aquellos a los que la sociedad casi nunca presta atención por tener puntos de vista minoritarios o defender ideas no compartidas por la inmensa mayoría de la población se unan a movimientos en formación donde se les da cabida con el objetivo de dar visibilidad a sus propuestas. Esto es comprensible y legítimo. Ya ocurrió con el 15-M.

Desde sus comienzos, Podemos no ha vetado la creación de ningún Círculo (excepto alguno creado con fines claramente maliciosos para con el proyecto político). No en vano, la democracia radical está inscrita en el ADN del movimiento. Así pues, es posible que se hayan creado algunos Círculos temáticos en torno a pseudociencias. Por ejemplo, el Círculo Podemos Terapias Naturales. Sus promotores tienen todo el derecho del mundo a defender sus métodos. Ahora bien, que exista un Círculo no implica que el movimiento en su conjunto acepte sus ideas. De hecho, a juzgar por los comentarios de su página de Facebook, hay una abrumadora mayoría de gente que considera que sin argumentos científicos no llegarán a ningún lado. Parece algo seguro que si en el futuro las bases de Podemos votasen democráticamente alguna propuesta de este Círculo, sería rechazada.

En respuesta a esos Círculos minoritarios que actúan como si representaran la opinión de los simpatizantes de Podemos se han creado Círculos satíricos como Podemos Estrella de la Muerte, Podemos Plutón y Podemos Churrasco. El éxito de estos Círculos indica que las bases entienden perfectamente que crear un Círculo no quiere decir que los ciudadanos que forman parte del proyecto acepten automáticamente lo que se plantea en él.

Aquellos en cuyas cabezas no cabe otra estructura más allá de la de un aparato del partido, aquellos que están acostumbrados al pensamiento único impuesto desde la cúpula y plasmado en argumentarios diarios enviados por correo electrónico y aquellos para los que la democracia significa votar una vez cada cuatro años y después callar y obedecer ciegamente al gobierno de turno aunque sus políticas estén llevando a la sociedad al desastre tienen miedo al cambio que representa Podemos y, en su búsqueda desesperada de razones para desacreditar al movimiento, utilizan la existencia de estos Círculos alternativos para manipular la opinión de la gente y ponerla en su contra. Pero no podrán. Porque tras las últimas elecciones europeas la ciudadanía ha visto que si se quiere, se puede. Y podrá.